Importancia de las habilidades informacionales como educadores
Aquí os dejo mi reflexión personal sobre el tema tratado:
Como nos decía Alicia, los maestros comunican en su aula información de su alrededor: de sucesos importantes que ocurren, de nuevos descubrimientos, de desastres meteorológicos, etc. Esta información y la habilidad que el maestro tenga de transmitirla, delimitará la calidad de la comunicación con el alumnado y contribuyen a la forma que tiene el niño para conocer el mundo. Como podemos imaginar, por lo tanto, es importante, en primer lugar, tener la capacidad y herramientas para saber dónde buscar información fiable.
Hoy en día, hay personas a las que les interesa que algunas noticias se hagan públicas y otras a las que no les interesa. Por ello, se publican y se comparten en los medios más populares noticias de dudosa procedencia y honestidad, las cuales contribuyen a una oleada de bulos y mentiras que pueden causar grandes problemas en la sociedad. Los maestros deben presentar a los niños esta situación y acercarles al periodismo, enseñarles los recursos que hay y sus utilidades. Recordemos que les estamos enseñando a ser ciudadanos racionales y críticos.
Estos últimos años estamos viviendo momentos históricos, momentos en los que hay conflictos e intereses que polarizan a la población, que se viralizan fake news en plataformas como twitter o Instagram, y los niños, nacidos en el mayor auge de la tecnología, están rodeados de estas y pueden creer todo lo que leen si no hay una educación adecuada en este sentido.
Alicia nos dio unas claves sobre cómo evitar bulos y formas de leer correctamente noticias, algunas de ellas son: informarse en más de una fuente para recoger los datos que coincidan y que estén comprobados, la geolocalización de las imágenes, la búsqueda inversa, etcétera.
En conclusión, me pareció una charla bastante útil e interesante, y ahora en adelante tendré en cuenta y pondré en práctica estas técnicas para no caer en el fallo de compartir noticias falsas ya que, cuando compartimos un bulo, no sabemos hasta dónde puede llegar ni los estragos que pudiera causar.